domingo, 29 de noviembre de 2009

Hugo Henrik Alvar Aalto



Nacido en Finlandia en 1898, Alvar Aalto es considerado una de las figuras más relevantes en la historia de la arquitectura y del diseño.

Siendo un icono de la corriente modernista, abarcó con su obra gran cantidad de ámbitos destacando en todos y cada uno de ellos a nivel mundial, (mobiliario, cristalería, iluminación, arquitectura, urbanismo…). En honor a este autor, se concede cada cinco años el “Premio Alvar Aalto” , prestigioso galardón de arquitectura.


- Con relación a las características de este diseñador, consideramos que su obra “Loungue Chair 43” participa íntegramente de sus principios.
Esta silla está realizada en madera y cuero, materiales muy recurridos en toda su obra. Esto se debe a su gran compromiso y respeto por los materiales naturales como los anteriores, característicos del diseño orgánico, movimiento del cual participa Alvar Aalto.
Consideramos que aparte de ser funcional y ergonómica, también posee un marcado carácter estético que nos lleva a su concepto de diseño y utilidad como una sola unidad, equiparando así forma y función.
Posee una estructura antropométrica muy marcada, pensada para el cuerpo humano. Esto lo consigue sin renunciar a la estética formal de la silla, aunque tampoco incide demasiado en ornamentación o sobrecarga de formas.



- Identificamos esta obra dentro de una de sus construcciones más importantes, que es Villa Mairea, casa de campo, construida por el arquitecto finlandés en Noormarkku. No sabemos exactamente donde la situó el autor pero creemos que esta es una de las posibilidades más probables. Las características de la silla concuerdan con el ambiente externo de la Villa, ya que situándola al lado del lago Saimaa establece una relación entre naturaleza, tradición y modernidad muy propia de Alvar Aalto. También se podría ambientar perfectamente en cualquier espacio interior, tanto de Villa Mairea como de cualquiera de sus otras construcciones.


- A pesar de la relación existente entre ambas, consideramos que por el carácter estético y funcional de la silla esta podría encajar en cualquier espacio, sea o no de su autoría. Sin embargo, el contexto más coherente donde interpretar la silla de forma adecuada es en una de sus arquitecturas, donde ambientes y diseños se integran como un todo unívoco.

- A nuestro parecer, sí es necesario controlar la utilización del mobiliario de diseño industrial. Cuando se realiza un nuevo concepto tanto en muebles como en otros aspectos, es necesario saber a quién o qué va a estar dirigido. Por poner un ejemplo, un objeto modernista no encaja en un espacio tradicional. A pesar de esto, con frecuencia en ambientes de diseño se mezclan en un mismo espacio objetos que a primera vista no armonizan con el ambiente, motivados por la intencionalidad de su autor. Una silla puede pegar en muchos espacios pero nunca se conseguirá situarla en un ambiente más íntegro que aquel para el cual fue diseñada.

- Para ejemplificar el desajuste que puede llegar a existir entre un diseño y su contexto, hemos seleccionado la cúpula de la Sala XX del palacio de las Naciones de la ONU en Ginebra, polémica y controvertida obra del artista y pintor Miquel Barceló. En esta sala se puede apreciar la falta de concordancia compositiva entre la obra del autor y el entorno que la rodea, entendiendo por entorno tanto el entorno material como la finalidad para la que está destinada esta sala.
Sin embargo, para determinar si la adecuación entre un diseño y su entorno es correcta, consideramos que es necesario conocer la intencionalidad del autor, ya que en muchas ocasiones se pretende crear precisamente este efecto de discordancia.